Fender Telecaster Custom 72 RI por Rubén Hernández |
Los que ya habéis leído la Comparativa entre una tele Custom USA y una tele Custom MIM podéis considerar este artículo como una continuación del mismo, ya que una cosa ha llevado a la otra. La diferencia de tacto era MUY notable entre el poliuretano de la MIM y la USA, y esa abrumante diferencia de grosor en el cuerpo me hacía preguntarme si era cosa del grueso de la tabla o del acabado de la MIM:
Una primera cuestión sobre la que quiero incidir antes de empezar a meternos en harina es que yo no soy un profesional de estas cosas ni soy luthier ni pintor-lacador profesional, así que no es mi intención sentar cátedra sobre nada y que nadie crea que esta es la única ni la mejor manera de hacer las cosas.
Se dan las circunstancias de que por mi profesión y por dedicación también al margen de la misma, tengo conocimientos sobre el uso de pinturas y ciertas herramientas relacionadas con la misma desde hace unos 25 años y es sólo por ello y por un desmedido atrevimiento a “cagarme las manos” por lo que de vez en cuando me atrevo con estas cosas. No obstante, lo anterior tampoco quiere decir que podáis hacer esto en vuestras casas o en vuestras cocinas ( atento, Elías…eh? ).
Durante todo el proceso se usan materiales, herramientas y productos químicos sobre los que hay que tener ciertos conocimientos y guardar algunas MEDIDAS DE SEGURIDAD sobre las que nunca nos cansaremos de hacer hincapié, así que ¡cuidadín!. Dividamos el proceso que vamos a seguir en cuatro partes:
Esto es bien sencillo, pero sólo es por recordar que antes de decapar hay que retirar todas las piezas que no queramos que el producto pueda dañar (ojo con las piezas de plástico!!!, golpeador, mandos y demás). Los que no hayan desmontado nunca una fender de tres tornillos en el neckplate verán que el tercer tornillo es de rosca métrica. Luego veréis lo que es el mircotilt y ese agujerito pequeñito que véis donde “no hay nada” aparentemente.
Vemos que tras el neckplate, ese miniagujero de la placa es realmente un “gran” taladro:
...y que aparecen esas dos “chapas” que no vemos en otros cuerpos y mástiles que no llevan micro tilt:
Ese tornillito pequeño que vemos sobresalir de la placa puede accionarse sin desmontar el mástil, tan sólo necesitamos aflojar un poco el tercer tornillo de fijación y mediante una llave Allen de la medida apropiada y apretar en el agujerito del neckplate que nos da acceso al micro tilt. Se trata de un sistema que introdujo Fender en los años 70 para poder ajustar en inclinación el mástil de sus guitarras. Este sistema siempre ha sido criticado porque según algunos resta “contacto” entre mástil y cuerpo con la consiguiente pérdida de transmisión de vibraciones entre ellos. Más adelante, cuando en los años 80 se presentaron los modelos American Standard de telecaster y Stratocaster, este sistema se presentó “evolucionado” y lo llevaban las guitarras ya con neckplate de cuatro tornillos. Muchos modelos de Fender lo siguen incluyendo entre sus “mejoras”
Por si alguien quiere ver como es el routing de una tele custom. Observad ese gran routing en forma de “S” que conecta cavidad de controles con la pasti de mástil y la cavidad del switch
Curiosamente ponen un código de barras que cubren con cinta de carrocero antes de pintar los cuerpos. Esta cinta de carrocero la retiran antes de la laca final, para que no podamos simplemente arrancarla y que quede debajo del barniz. Supongo que es para poder inventariar el cuerpo desde que la máquina lo corta y está listo para pasar a la zona de pintura en la fábrica
(Consultar http://es.wikipedia.org/wiki/Decapado_de_pintura)
Se trata de retirar la pintura que trae el cuerpo de fábrica. Básicamente hay tres formas de hacerlo:
Una vez decidido que usaríamos un decapante químico, preparamos en el taller el material siguiente:
Ahí veis el mástil preparado para ser decapado dispuesto sobre una cubeta (ya veréis más adelante cómo lo preparamos), una espátula pequeña (conviene tener alguna de plástico), un par de cepillitos (uno de dientes y uno de púas finitas), unos guantes, una pinceleta y el gel decapante.
PRECAUCIONES:
Vemos cómo hemos procedido con el decapado del mástil: Para evitar que cayera alguna gota de decapante sobre la pala (queremos conservar la calca original), la hemos protegido con cinta de carrocero:
Ahora se trata de ir con cuidado aplicando con un pincel o una brocha pequeña, el producto sobre el mástil:
Se deja actuar el decapante durante unos minutos (leed las instrucciones del fabricante) con el cepillo de dientes y si fuera preciso con uno de púas muy finitas. Vamos, “ayudando” a levantar la pintura.
Nos valemos de una espátula o rasqueta de plástico para ir “renovando” el producto sobre el mástil e ir retirando el decapante y restos de laca que ya va saliendo a modo de escamas o costras, como podéis observar en esta otra foto:
Una vez que hemos terminado de decapar el mástil, limpiamos el mismo con un trapo humedecido en disolvente para comprobar que retiramos todo los restos de laca y gel decapante y ya lo tenemos listos para el lijado.
Vamos con la parte “dura” del trabajo. Decapar el cuerpo. AVISO: esto puede llevar HORAS e incluso DÍAS, dependiendo del tipo de pintura y base o tapaporos que tenga el cuerpo. Repetimos el sistema de la cubeta como hemos hecho con el mástil:
Aquí vemos cómo va actuando el decapante y ya podemos ver el aspecto que tiene la madera que esconde esa gruesa capa de poliuretano:
En un detalle podemos ver como se van exfoliando las distintas capas de laca, pintura, …hasta llegar a la madera:
Aquí ya me iba dando cuenta de que el grueso de pintura que trae este cuerpo de fábrica es tremendo:
En este otro detalle se ve junto a la espátula un buen trozo o costra de pintura que ha saltado entero:
Pero por si no se apreciaba, saqué el cuerpo de la cubeta e hice estas otras dos fotos de la zona del “hombro” donde se ve asomar el routing y cavidad del switch:
Se observa perfectamente que no tiene una “capita” de pintura, ¿¿no??, pues imaginad lo que ese recubrimiento tan grueso está permitiendo “hacer sonar” la madera de vuestra guitarra. Lo voy a comentar como detalle curioso, ¡decapar completamente el cuerpo me llevó 48!! horas de “remojo” en el gel decapante.
Vamos con el mástil. Se trata de lijar cada vez con lijas muy finas en el sentido de la veta. Como veis en esta foto, yo me he servido de una esponja blandita sobre la que he envuelto la lija, con el fin de adaptarme a la curvatura del mástil:
Por el lado delantero primero protegí los trastes con cinta de carrocero (sólo los trastes) antes de lijar. La superficie debe quedar perfectamente lisa para recibir la nitro. Aquí vemos el lado delantero del mástil, donde podemos observar que en el lado delantero de la pala no hemos decapado ni lijado, para conservar la calca original:
Me hice con un listón en el que tallé la curva para ponerlo atornillado donde va la chapa del Micro Tilt en el mástil, y así poder manejar mejor el mismo para lacar por delante y por detrás en una sola operación:
Podéis ver en esa foto y en esta otra cómo hice alguna mínima rectificación a base de lija en el contorno trasero del mástil:
Antes de empezar a tirarle la nitrocelulosa, le doy aire a presión por todos lados con el fin de retirar cualquier mínimo resto de polvo que pueda quedar del lijado. El polvo es el principal enemigo de un buen acabado. El proceso con el cuerpo es prácticamente el mismo. Lija y más lija y cada vez más finita. Aquí veis el cuerpo por delante:
Y así se ve por detrás. Lo he humedecido levemente con un trapo para que se vean bien las tres piezas de aliso (la Custom USA es de fresno. Ojalá esta también lo fuera)
...y también lo atornillé a una tabla para poder manejarlo bien y para no pintar el pocket del mástil. Hay quien defiende que el contacto entre cuerpo y mástil debe ser madera con madera. En nuestro caso, como originalmente el pocket permanece sin pintar, pues así hemos querido que sea. El tono irregular que se observa en la madera es simplemente un pequeño resto de humedad que se volatilizará en un par de minutos. Un truco que a veces utilizo para eliminar cualquier resto de grasa de las manos o de alguna herramienta, es justo unos minutos antes de empezar a pintar y después de dar aire a presión para eliminar restos de polvo, pasar un trapo levemente impregnado en disolvente por toda la superficie. Antes de empezar a pintar hay que esperar a que evapore completamente. Si se ven “manchas” como en esta foto hay que esperar a que evaporen completamente
La primera parte (y muy importante) para conseguir un buen acabado es la imprimación o el tapaporos. Se trata de una capa de pintura que nos permite igualar la superficie para que tenga el mismo grado de absorción en toda su extensión. De otro modo al tratarse de madera las vetas podrían producir irregularidades de permeabilidad de la pintura y eso nos daría como resultado un acabado “rechupado” en algunas zonas.
Todos entendemos que en las guitarras con acabado sunburst y otros acabados transparentes, ese tapaporos ha de ser también transparente para que deje ver la veta de la madera, pero si miráis en algunas webs especializadas en guitarras vintage, como por ejemplo la fantástica http://www.provide.net, veréis que las guitarras Fender con acabado sólido llevaban una imprimación de color blanco. De ahí que muchas de aquellas viejas Fenders, cuando se iban desgastando o por causa de golpes o roces, dejaban aparecer esa imprimación blanquecina. Por otra parte, el “color actual” que muestran algunas de aquellas viejas guitarras habría sido imposible, entre otras cosas porque el color real de algunas de ellas es una superposición del resultante del envejecimiento (amarilleado) de las viejas nitros traslúcidas sobre la imprimación blanca. Yo soy uno de los que le gustan que la guitarra a medida que se va gastando, muestre esa base blanca debajo del color final.
Hay quien cree equivocadamente que utilizar una imprimación empeora la “calidad sonora” de un acabado. Craso error. Se puede (y se debe) aplicar una imprimación a una guitarra de manera que el grueso total de esta capa de pintura no tiene porqué ser mayor que un folio (hablamos de micras) Ya lo comprobaremos al final con el calibrador. Ahora y antes de empezar a pintar, veamos lo que nos indica de nuevo la herramienta:
Haced la resta con el valor que nos daba cuando la guitarra tenía el acabado original y veréis el grueso que tenía de pintura. Esto son CIFRAS OBJETIVAS. No me estoy inventando nada sobre el acabado de esta guitarra y doy por sentado que no será la única Fender que llega a las tiendas así.
Sigamos con lo nuestro. ¿qué imprimación utilizar?. Hay muchas marcas en el mercado y cada fabricante de pinturas formula productos para una u otra utilidad o superficie. Haced pruebas si queréis, pero yo ya he hecho las mías y tras muchos ensayos y experiencias a lo largo de algunos años, hace un tiempo que uso esta:
Antes la misma marca presentaba el producto en otro tipo de envases y con otra denominación. Va estupenda. Buen secado, buen poder cubriente del poro, muy tixotrópica (se “descuelga” poco al aplicarla), muy fácil lijado... Me parece un producto estupendo de esta marca. Aquí vemos el cuerpo tras la aplicación de la primera capa:
Tras el secado, volvemos a lijar:
Hay que dejar la superficie PERFECTA a base de lija fina. Sin baches o zonas “rechupadas” y como el culete de un niño: "piel de naranja" cero. Si se observan golpes, o agujeros que haya que empastar, es el momento de volver a lijar esa zona hasta alisar completamente o empastar si no queda más remedio, y volver a aplicar imprimación. Tras un secado (mirar instrucciones del fabricante del producto que apliquéis) y lijado perfecto, aplicamos aire a presión para retirar cualquier mota de polvo que pueda quedar antes de empezar a pintar
La nitrocelulosa la podéis encontrar de muchas marcas y calidades. No me voy a entretener en defender o denostar otras, pero después de haber probado unas cuantas (de las baratas y de las caras), me he decidido a usar esta marca española que formula y fabrica estupendas pinturas y barnices en una amplísima gama de calidades y utilidades: www.valresa.com.
Para un mejor rendimiento y acabado con este producto utilizo el disolvente recomendado por el propio fabricante de la laca y en la proporción recomendada. Vamos aplicando el negro:
Hay que aplicar una o dos capas, las que sean necesarias para conseguir un negro homogéneo y regular por toda la superficie. Yo soy partidario de usar la mínima pintura posible. Para proteger el negro de arañazos, golpes y demás ya aplicaremos luego laca transparente encima las capas que sean necesarias. El negro lo aplico muy suavemente (con la pistola más bien cerrada. Tirando poca carga) y no lijo tras aplicarlo. Lo dejo dejar secar perfectamente por lo menos 24 horas en un lugar seco y libre de polvo.
Hay quiénes se hacen con un tubo y una cortina de ducha un “falso” cuarto de secado que viene muy muy bien para que no entre polvo y uno pueda seguir trabajando en otras cosas en el taller. No es mala idea si no tienes un sitio específico para dejar las cosas secándose. En lo que seca el cuerpo, nosotros vamos a seguir con el mástil.
Para ello (ya que lo que queremos es un mástil de aspecto vintage) he preparado varias nitros con distintos tonos que van desde su color transparente como sale del bote hasta una nitro realmente “envejecida”, para progresivamente ir acercándonos por medio de la superposición de capas, al color deseado. Aquí están para que veáis los diferentes tonos con los que he trabajado:
Todas han sido utilizadas en el mástil de esta guitarra…y eso sí, no os contaré cómo las he dejado con esos distintos tonos. Permitid que me guarde algún secretillo para mi Vamos con la primera capa:
...y así seguimos con las que vayamos necesitando:
Esto del color no es una ciencia exacta. Se trata de un método intuitivo y deductivo: vamos aplicando lo que creemos que vamos necesitando y entre capa y capa vamos lijando con una lija fina fina de verdad, del 500 o del 800 mínimo. Tirando siempre poquita laca, con la pistola bien cerrada. Queremos capas finitas aunque haya que dar varias veces. El secreto de un buen acabado son las capas finas. Mejor dos capas finas que una gruesa. Una vez tenemos un tono que nos resulte ideal en el mástil, nos centramos sólo en la pala. Si observáis guitarras antiguas, veréis que siempre las palas tienen un tono más oscuro que el resto del mástil. Para ello cubrimos con cinta de carrocero el diapasón
...y para no aburrir, así ha quedado tras el secado, el lijado y pulido final:
Mucho más bonito a nuestro juicio que el mástil blancucho que nos vino de fábrica. Un detalle de la pala:
El procedimiento que seguimos ahora con el cuerpo es el mismo que con el mástil, pero sólo con laca transparente sobre el color negro no necesitamos usar laca “envejecida” de distintos tonos ya que sobre el negro no se nota el efecto de amarilleamiento de la nitro, salvo que estemos intentando conseguir un efecto Relic de verdad. Nosotros andamos detrás de un acabado NOS (New Old Stock). Esta es la guitarra terminada y montada lista para sonar:
Un detalle de la pala ya montada y acabada:
Unos detalles más para que veáis la diferencia de tono entre diapasón y pala:
...y aquí el tono del diapasón. Me encanta ese tono ámbar:
Un detalle del cuerpo. No sé si notaréis que el negro no se ve tan plasticoso como un acabo en poliuretano que parece “charol” con un brillo que a mi hasta me molesta cuando está nuevo.
También hay que decir que yo no quiero ese brillo, por lo que tampoco me vuelvo loco en pulir como un espejo, aunque veis por el reflejo que la superficie es totalmente homogénea y en mi opinión “suficientemente” pulida
Como última observación he de comentar que lo más “pesado” del trabajo con nitrocelulosa es “la espera”. Hay que dar muchas capas superpuestas y esperar muchas veces al secado de estas. El proceso se alarga (hasta poder montar finalmente la guitarra) hasta un mes y ya sabéis que yo vivo en Canarias, donde gozamos de una temperatura más o menos cálida y constante que facilita el secado de la pintura.
En fin…
Me voy a tocar mi Tele Custom, que ya no tengo más cosas que contar por hoy )
Para saber más: Repintando una Tele C72. Artículo en el foro de
guitarristas.org.
©Rubén Hernández
|
guitarristas.org